Angau Noticias

La presentación formulada por el gobierno ante la justicia federal con elementos que probarían una conspiración del rozismo dirigida a derribar a Jorge Capitanich se manejó hasta ahora con total hermetismo, al punto que ni el mismísimo gobernador sabría el contenido de la denuncia.

Sin embargo, Angaú Noticias una vez más apeló a su caja chica para cometear fuentes y obtener información exclusiva y más caliente que Silvia Suller en retiro espiritual.

En esta ocasión, se trata ni más ni menos que de una escucha telefónica realizada al diputado Miguel Melar, a quien se oye dialogar con un personaje no del todo identificado. La charla está repleta de sobreentendidos y frases en clave, pero se permite colegir cuál es el sentido de la conversación. La desgrabación de la comunicación telefónica es la siguiente:

(sonido de llamada y luego alguien atiende)

-¿Sí, hola?

-Hola, Melar habla.

-Ah, diputado, qué tal.

-Llamo por el tema que hablamos.

-Sí, mire, estamos en eso, eh. Acá se le habló bien a la gente... eeh... entendieron la importancia de esto, digamos.

-Perfecto. Yo te expliqué a vos que... eso... eeeh... o sea...

-Que es máxima reserva.

-Máxima reserva, exacto. Máxima reserva.

-Sí, eso también se le dijo a la gente acá, sabe... Va a andar bien... eeh...

-Ok, ok.

-(Se oyen otras voces de fondo, a veces fuertes) El tema, diputado, también es cómo se va a pagar esto ¿entiende?... O sea... no digo todo ahora, pero esta gente tiene sus compromisos, sus cuentas... Por ahí yo decía un poco hoy, otro poco mañana...

-No va a haber problema con eso, pero ningún problema. Ustedes hacen el trabajo y yo les pago. Así de simple. Los hombres de campo somos así.

-No, si no es que dude, ojo, es por esta gente...

-Yo voy a cumplir, pero ustedes también cúmplanme a mí.

-No, obvio, diputado, obvio... Otro tema es... eeeh... ¿si en el momento aparece el hombre, qué hacemos?... ¿Me entiende, no? "El Hombre", le digo...

-No actuemos tan fuerte, no lo ataquen, ni nada. Esperan, miran, y cuando esté limpia la zona se mandan.

-¿Usted va a estar?

-¡Obvio que voy a estar!¡A muerte voy a estar!

-Ok, diputado, es para tener todo cerrado nomás, por eso le pregunto.

-Quedate tranquilo. Lo que es importante, y eso quiero que les expliques bieeeen, muuuuy bien, a la gente, es que esto tiene que estar súper bien sincronizado, o se va todo al carajo. ¿Esto está claro, no?

-Sí, diputado, ya les dije eso. "Al diputado no hay que fallarle", les dije.

-Ok, porque el tema es actuar en caliente, o después ya se rompe el clima, no es lo mismo.

-Si, don Miguel, quédese tranqui. Repasemos entonces: le mando cuatro muzzarelas, después que salgan las dos de roquefort, espero media hora y ahí le mando las tres napolitanas y la cuatro quesos.

-Eeeeso, regulalo bien, porque si me mandás todas juntas se van enfriando y así ya no me gustan. Y ya te dije, si los chicos del delivery ven que está mi nutricionista en la vereda paseando el perro, que esperen, miren, y se manden cuando el tipo se vaya.

-Ok, ¿y va a acompañar con algo esto?

-Una Coca. Pero Coca Zero, eh, no me mandes la común porque no quiero andar haciendo desarreglos.

-Ok, van saliendo enseguida, diputado.

-Listo, chau.

(Se escucha que el tomador de pedidos de la pizzería corta el teléfono, pero el de Melar queda mal colgado y se oye que comienza a sonar un disco de El Chaqueño Palavecino)